- La jaula desesperada, el vaivén de su puerta en espera de un pájaro antisocial.
- ya cansados, mordisqueados y lamidos, el perro y el niño dejaron de gruñir y se separaron
- sólo al caer se dio cuenta de que había sido engañado por el vidrio y su reflejo
- llevaba más historias en la suela de su zapato que en su boca