Los viajes despegan del otro lado. Aquí, una niebla perpetua limita el espacio e invita a imaginar. (Desde nuestra posición, eso significa soñar en primera fila). En ocasiones una luz la atraviesa, de aparición inexplicable, insólita, deseada. El paso de los tiempos transformó nuestra esperanza en realidad: afuera existe una salida. Cuando estuvimos a punto de partir, nuestro horizonte se derritió a nuestros ojos, porque la puerta del refrigerador sólo funciona en un sentido.